Jaca, la perla del Pirineo, es una ciudad vibrante, acogedora y animada, con una renovada red de servicios e infraestructuras.
Además de ser un importante centro turístico y la capital de los deportes de invierno del Pirineo, sus calles y su notable legado monumental nos explican sus más de 2.000 años de historia.
Su casco antiguo es uno de los mejor conservados de Aragón y, a través de sus edificios, se pueden estudiar todos los estilos y todas las épocas.
Jaca fue la primera capital del Reino de Aragón y un punto clave del Camino de Santiago gracias a su cercanía a la frontera lo que ha marcado su carácter cosmopolita, abierto y la ha mantenido fuertemente ligada a la cultura.
Empezando por el impresionante monasterio de San Juan de la Peña, del s. X, cuna del reino y su bella Catedral románica, una de las más antiguas de España, llegamos a la Casa Consistorial, el monasterio de las Benedictinas y la Torre del Reloj para terminar en sus casa modernistas.
Encontramos huellas de su naturaleza fronteriza en espacios defensivos como la Ciudadela y el Fuerte Rapitán.